Post by realeagle on Nov 29, 2010 0:09:14 GMT -5
Para reír... para gozar
El Águila logró el cuarto puesto de la semifinal, ayer tras derrotar a Atlético Marte. En esa instancia abrirá de local ante Metapán
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No había comenzado el partido, ni siquiera se había cantado el Himno Nacional, y ya Aguila se veía en el repechaje por el gol tempranero de Balboa a la UES, pero los migueleños acusaron la presión extra y al final salieron con el boleto a la semifinal en mano tras derrotar a Atlético Marte por 0-2.
Y es que el de ayer era un partido de urgencias para los migueleños. No sólo tenía que ganar en el "Mágico" González al Marte, sino también "apretar" por que Balboa no derrotara a la UES en el Marcelino Imbers de La Unión. Sin embargo, cuando apenas estaban por formarse los equipos en el coloso capitalino, ya Manfredi Portillo ponía adelante al "Ciclón" ante la UES. Más presión para los naranja, imposible.
Pero Águila sabe lo que hace. A qué juega. Y desde el inicio, como era lógico, se lanzó en busca del triunfo que le podía significar el boleto a la semifinal. Lo logró en parte por un Marte apático, muy partido en sus líneas, un equipo que dio la impresión de que quería que el campeonato terminara ya.
De no ser por el ímpetu que le imprimió Gilberto Baires y Juan Carlos Melgar arrancando desde el medio, el conjunto bandera hubiera sufrido más de lo que lo hizo ante una delantera aguilucha que quería definir el partido temprano. Alcides Banderas no fue el mismo ayer en el ataque de Marte. Ni el Marte fue el mismo equipo de hace siete días. Ayer el alma azul no apareció.
Apenas dos tiros en todo el partido fue el aporte de los marcianos, y al final del partido. Uno de Glauber Da Silva, en un tiro libre que sacó Miguel Montes en vuelo espectacular al 67' y otro de Juan Carlos Melgar ya en el descuento que se estrelló en el ángulo derecho de la portería aguilucha. De ahí, no hubo más para los bandera.
La otra cara
Águila, en cambio, mostró que quería el boleto desde el principio. En apenas 10 minutos, ya contaba tres tiros de esquina y un par de jugadas en las piernas del argentino Patricio Barroche, el más incisivo en el ataque oriental. Tanto, que se ganó la tarjeta amarilla en una jugada que pareció penalti, al 10', pero que el árbitro Joel Aguilar Chicas interpretó de otra manera.
Un minuto más tarde, el mismo Barroche finalizó una jugada que inició en el medio un talentoso Irving Flores, un juvenil que ayer contó con la confianza del técnico Eraldo Correia, la siguió Ramón Sánchez con un pase entre los defensores para el argentino y este puso la pelota en el ángulo inferior de la portería de Gómez. Era el 0-1 y la tranquilidad en un cuadro que, hasta ese momento, pensaba más en La Unión que en su partido.
Tranquilidad porque a partir del gol Águila cambió. Se replegó, paseó el balón y buscaba sorprender con una jugada elaborada.
Contaba con hombres capaces de hacerlo. El mismo Flores tuvo el 0-2 en una jugada que él mismo se fabricó, al 21', pero a la hora de "bombear" la pelota en la salida de Gómez, no pudo ante el lamento de Correia y compañía.
Tras el descanso Marte salió con otra cara. Intentó presionar, adelantó las líneas, pero sus líneas siguieron divorciadas. Banderas no apareció y nunca apoyó a Baires, Melgar y en ocasiones Albarrán. El ataque marciano naufragó, a pesar de que Juan Ramón Paredes movió sus piezas para llevar más gente a esa zona, con el ingreso de Julio Maya y Ricardo Orellana.
Correia respondió con William Torres Alegría por Irving Flores y Águila agradeció el cambio. Minutos antes había llegado el "Zurdo" Reyes y ambos demostraron que con ellos el conjunto migueleño es otro.
Segundo y fiesta
Así fue. Quizás en la primera pelota que tocaba el "berreñeque" Torres Alegría, arrancó del medio campo y cruzó el balón a la llegada de Shawn Martin por derecha, el carrilero atrasó el centro a la llegado del "Zurdo", quien disparó a puerta y la suerte se alió con Torres Alegría para que desviara el balón al fondo de la portería marciana.
Con el partido liquidado, Águila ya no se preocupó de lo que sucedía en La Unión y dejó pasar el tiempo con comodidad.
Marte, en cambio, parecía vencido incluso desde el primer tiempo. Sólo el aporte de Baires, Melgar y en ocasiones Orellana no alcanzó para un equipo que se esperanzó a una jugada a balón parado para descontar al menos un gol.
Así se vino el derechazo del zaguero brasileño Da Silva en tiro directo que "el Mudo" sacó, y el trallazo de Melgar que pegó en la escuadra, pero fue demasiado poco y los migueleños celebraron una clasificación sufrida como apretada al final de un torneo especial por asuntos extradeportivos.
Ahora les llega el campeón Metapán al Barraza en una semifinal que tiene como antecedente la de 2006, el año de la remontada naranja ante los caleros y cuando después, en la final, alzaron la Copa 14.
El Águila logró el cuarto puesto de la semifinal, ayer tras derrotar a Atlético Marte. En esa instancia abrirá de local ante Metapán
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No había comenzado el partido, ni siquiera se había cantado el Himno Nacional, y ya Aguila se veía en el repechaje por el gol tempranero de Balboa a la UES, pero los migueleños acusaron la presión extra y al final salieron con el boleto a la semifinal en mano tras derrotar a Atlético Marte por 0-2.
Y es que el de ayer era un partido de urgencias para los migueleños. No sólo tenía que ganar en el "Mágico" González al Marte, sino también "apretar" por que Balboa no derrotara a la UES en el Marcelino Imbers de La Unión. Sin embargo, cuando apenas estaban por formarse los equipos en el coloso capitalino, ya Manfredi Portillo ponía adelante al "Ciclón" ante la UES. Más presión para los naranja, imposible.
Pero Águila sabe lo que hace. A qué juega. Y desde el inicio, como era lógico, se lanzó en busca del triunfo que le podía significar el boleto a la semifinal. Lo logró en parte por un Marte apático, muy partido en sus líneas, un equipo que dio la impresión de que quería que el campeonato terminara ya.
De no ser por el ímpetu que le imprimió Gilberto Baires y Juan Carlos Melgar arrancando desde el medio, el conjunto bandera hubiera sufrido más de lo que lo hizo ante una delantera aguilucha que quería definir el partido temprano. Alcides Banderas no fue el mismo ayer en el ataque de Marte. Ni el Marte fue el mismo equipo de hace siete días. Ayer el alma azul no apareció.
Apenas dos tiros en todo el partido fue el aporte de los marcianos, y al final del partido. Uno de Glauber Da Silva, en un tiro libre que sacó Miguel Montes en vuelo espectacular al 67' y otro de Juan Carlos Melgar ya en el descuento que se estrelló en el ángulo derecho de la portería aguilucha. De ahí, no hubo más para los bandera.
La otra cara
Águila, en cambio, mostró que quería el boleto desde el principio. En apenas 10 minutos, ya contaba tres tiros de esquina y un par de jugadas en las piernas del argentino Patricio Barroche, el más incisivo en el ataque oriental. Tanto, que se ganó la tarjeta amarilla en una jugada que pareció penalti, al 10', pero que el árbitro Joel Aguilar Chicas interpretó de otra manera.
Un minuto más tarde, el mismo Barroche finalizó una jugada que inició en el medio un talentoso Irving Flores, un juvenil que ayer contó con la confianza del técnico Eraldo Correia, la siguió Ramón Sánchez con un pase entre los defensores para el argentino y este puso la pelota en el ángulo inferior de la portería de Gómez. Era el 0-1 y la tranquilidad en un cuadro que, hasta ese momento, pensaba más en La Unión que en su partido.
Tranquilidad porque a partir del gol Águila cambió. Se replegó, paseó el balón y buscaba sorprender con una jugada elaborada.
Contaba con hombres capaces de hacerlo. El mismo Flores tuvo el 0-2 en una jugada que él mismo se fabricó, al 21', pero a la hora de "bombear" la pelota en la salida de Gómez, no pudo ante el lamento de Correia y compañía.
Tras el descanso Marte salió con otra cara. Intentó presionar, adelantó las líneas, pero sus líneas siguieron divorciadas. Banderas no apareció y nunca apoyó a Baires, Melgar y en ocasiones Albarrán. El ataque marciano naufragó, a pesar de que Juan Ramón Paredes movió sus piezas para llevar más gente a esa zona, con el ingreso de Julio Maya y Ricardo Orellana.
Correia respondió con William Torres Alegría por Irving Flores y Águila agradeció el cambio. Minutos antes había llegado el "Zurdo" Reyes y ambos demostraron que con ellos el conjunto migueleño es otro.
Segundo y fiesta
Así fue. Quizás en la primera pelota que tocaba el "berreñeque" Torres Alegría, arrancó del medio campo y cruzó el balón a la llegada de Shawn Martin por derecha, el carrilero atrasó el centro a la llegado del "Zurdo", quien disparó a puerta y la suerte se alió con Torres Alegría para que desviara el balón al fondo de la portería marciana.
Con el partido liquidado, Águila ya no se preocupó de lo que sucedía en La Unión y dejó pasar el tiempo con comodidad.
Marte, en cambio, parecía vencido incluso desde el primer tiempo. Sólo el aporte de Baires, Melgar y en ocasiones Orellana no alcanzó para un equipo que se esperanzó a una jugada a balón parado para descontar al menos un gol.
Así se vino el derechazo del zaguero brasileño Da Silva en tiro directo que "el Mudo" sacó, y el trallazo de Melgar que pegó en la escuadra, pero fue demasiado poco y los migueleños celebraron una clasificación sufrida como apretada al final de un torneo especial por asuntos extradeportivos.
Ahora les llega el campeón Metapán al Barraza en una semifinal que tiene como antecedente la de 2006, el año de la remontada naranja ante los caleros y cuando después, en la final, alzaron la Copa 14.
