Post by realeagle on Jan 19, 2010 13:41:51 GMT -5
“Sueño con dirigir la Selección"
Nelson Ancheta, el técnico del Águila puntero, no se descarta como un candidato potencial para sustituir a De los Cobos al frente de la Azul Ni un mes tiene Nelson Ancheta con Águila, pero en poco tiempo ha guiado a su equipo a la cúspide del Clausura 2010, en dos fechas. Desde que asumió las riendas en el nido entendió la presión que lo perseguiría: la conquista del título. Su compromiso con sus jugadores está, se ha planteado no entrar en polémica con Wil Salgado por armonía del equipo y se ha prometido no dar razones para ser expulsado. De momento todo marcha bien. Y sobre el rumor de un interés personal por dirigir a la Selección, hizo sus confesiones. Empecemos por la Selección. Después de la final del Once, dijo que sólo le faltaba dirigir al cuadro nacional. ¿Insiste en esa idea? Sería un mentiroso si digo que no me interesa dirigir algún día a la Selección. No es mala idea que los dirigentes se fijen en un entrenador salvadoreño, como ocurrió hace un par de años (con Ramón Paredes, "Imacasa" Recinos,..). Pero hay situaciones que bloquean a que un nacional sea tomado en cuenta. ¿Cuál es el freno? No tenemos representantes, a diferencia de los técnicos extranjeros. Por eso uno se conforma con ganar poco, porque éstos quieren ganar del salario del entrenador, como premio a la persistencia de colocarlos en un puesto. Así es este medio. Un representante le insiste tanto a un dirigente y termina colocando a jugadores y entrenadores. ¿Usted no ha presentado su currículum? No me he ofrecido, pero la gente pregunta por mí. Amigos de Washington, Dallas y Houston. Valoran lo que he ganado en poco tiempo (tres títulos con Once Municipal -en Liga Mayor, Copa Presidente y Segunda- más su pasado con la reserva de FAS). Aún recuerdan que fui asistente de Carlos De los Cobos en FAS (2005) y que coincidí con el preparador físico Álvaro Briones. Todo esto me motiva a seguir soñando con dirigir la Selección nacional. Ya tiene 22 días con Águila, ¿cómo ve al equipo, después de dos victorias? Los triunfos siempre dan ánimo y entusiasmo, a pesar de que es poco el trabajo que hemos hecho. La ventaja es que la base del grupo tiene días trabajando, pero falta que agarren bien mis ideas. Hay que mejorar lo físico y táctico. ¿Ha encontrado algún defecto en el juego colectivo? Hay que mejorar la posesión de la pelota porque no podemos perderla con facilidad. El domingo contra Limeño caímos en la trampa de Víctor Coreas porque el rival jugó al pelotazo y, en una jugada infantil de Deris (Umanzor), nos pitaron penal. Un jugador que marcó para Águila fue Isaac Zelaya. Antes de que llegara usted, era transferible... Todos los jugadores, no sólo él, tratan de convencer a un nuevo entrenador. Él es sólido en defensa y ayudó con un gol, aunque su puesto original en el campo es la contención. Él, como Luis Hernández y Leonel Guevara están aprovechando las oportunidades porque hay competencia sana. ¿Por qué no alineó a Hermes Martínez? Llegó un día antes del primer partido (viernes 8 de enero) y físicamente no vino acorde al trabajo que se hizo en la reducida pretemporada. En la semana pasada, trabajó bien y es muy probable que juegue el sábado contra Metapán. Ha sido responsable en esperar su turno.
Los goles de su equipo no han sido de los delanteros, ¿lamenta no contar con Addlery? Lo solicité a la directiva, pero el jugador decidió irse a México. Esperaríamos a que Nicolás Muñoz o Arturo Albarrán se nacionalicen para buscar un delantero fuerte y veloz, que tenga las mismas características de Addlery. Mientras eso sucede, espero que Muñoz, Nelson Reyes, Corrales, Álvarez o Darwin demuestren que quieren ser titulares. Dos refuerzos que se frustraron en el camino son Carlos Carrillo (Limeño) y Josué "el Chino" Flores. ¿Qué pasó en cada caso? Carrillo cometió el error de irse de Limeño, cuando ya estaba inscrito en la nómina. Nunca le hablé para que viniera a Águila, pero si pidió la oportunidad de trabajar conmigo porque coincidimos en Nejapa. Estaba atado y no pudo arreglar con nosotros. El domingo lo vi en la cancha, pero no hubo oportunidad para saludarnos... lo del "Chino" fue distinto. No llegó por el tema económico. Me interesaba por que trabajamos en FAS, pero se decidió por Metapán. Espero que este sábado no le vaya bien contra Águila. Después, que rinda con su equipo y con la Selección porque lo ha llamado Rugamas. ¿Cómo va la relación técnico-dirigente con Wil Salgado? ¿Ha tenido algún roce en el camino? Ninguno. Con Wil es diferente al caso que vivió Eraldo Correia. Nunca me ofrecí, ni pedí estar en el banquillo de Águila, aunque dije en otra oportunidad que sí estaba en mi mente dirigir al equipo porque era la quinta vez que preguntaban por mí. Cuando ocurre esto, te dan la confianza y no hay roces. El vínculo técnico-dirigente lo estamos manejando bien. Tenemos un acuerdo de no opinar nada en contra del otro para no afectar al camerino. Antes era expulsado con frecuencia, como le ocurre a sus colegas Edwin Portillo y "Toto" Gamarra... Entendí que los árbitros me expulsaban por tonteras. Desde el año pasado, cuando tenía al Nejapa, vengo cambiando. ¿Qué piensa de la sanción impuesta al "Bochinche", por cuatro juegos? Cuatro juegos es una dura sanción. Le faltó ser más vivo y averiguar por su propia cuenta en la Primera si tenía sanción. Siempre hago eso cuando sé que reclamé al final de un partido o algún jugador tiene tarjeta. Por ejemplo, confirmé con la Fesfut que "el Pichuta" Cabrera tenía un juego de castigo, no dos por la roja que vio en la final. Cada quien sabe qué hace. Si hay un reclamo airado, los árbitros no te perdonan
Nelson Ancheta, el técnico del Águila puntero, no se descarta como un candidato potencial para sustituir a De los Cobos al frente de la Azul Ni un mes tiene Nelson Ancheta con Águila, pero en poco tiempo ha guiado a su equipo a la cúspide del Clausura 2010, en dos fechas. Desde que asumió las riendas en el nido entendió la presión que lo perseguiría: la conquista del título. Su compromiso con sus jugadores está, se ha planteado no entrar en polémica con Wil Salgado por armonía del equipo y se ha prometido no dar razones para ser expulsado. De momento todo marcha bien. Y sobre el rumor de un interés personal por dirigir a la Selección, hizo sus confesiones. Empecemos por la Selección. Después de la final del Once, dijo que sólo le faltaba dirigir al cuadro nacional. ¿Insiste en esa idea? Sería un mentiroso si digo que no me interesa dirigir algún día a la Selección. No es mala idea que los dirigentes se fijen en un entrenador salvadoreño, como ocurrió hace un par de años (con Ramón Paredes, "Imacasa" Recinos,..). Pero hay situaciones que bloquean a que un nacional sea tomado en cuenta. ¿Cuál es el freno? No tenemos representantes, a diferencia de los técnicos extranjeros. Por eso uno se conforma con ganar poco, porque éstos quieren ganar del salario del entrenador, como premio a la persistencia de colocarlos en un puesto. Así es este medio. Un representante le insiste tanto a un dirigente y termina colocando a jugadores y entrenadores. ¿Usted no ha presentado su currículum? No me he ofrecido, pero la gente pregunta por mí. Amigos de Washington, Dallas y Houston. Valoran lo que he ganado en poco tiempo (tres títulos con Once Municipal -en Liga Mayor, Copa Presidente y Segunda- más su pasado con la reserva de FAS). Aún recuerdan que fui asistente de Carlos De los Cobos en FAS (2005) y que coincidí con el preparador físico Álvaro Briones. Todo esto me motiva a seguir soñando con dirigir la Selección nacional. Ya tiene 22 días con Águila, ¿cómo ve al equipo, después de dos victorias? Los triunfos siempre dan ánimo y entusiasmo, a pesar de que es poco el trabajo que hemos hecho. La ventaja es que la base del grupo tiene días trabajando, pero falta que agarren bien mis ideas. Hay que mejorar lo físico y táctico. ¿Ha encontrado algún defecto en el juego colectivo? Hay que mejorar la posesión de la pelota porque no podemos perderla con facilidad. El domingo contra Limeño caímos en la trampa de Víctor Coreas porque el rival jugó al pelotazo y, en una jugada infantil de Deris (Umanzor), nos pitaron penal. Un jugador que marcó para Águila fue Isaac Zelaya. Antes de que llegara usted, era transferible... Todos los jugadores, no sólo él, tratan de convencer a un nuevo entrenador. Él es sólido en defensa y ayudó con un gol, aunque su puesto original en el campo es la contención. Él, como Luis Hernández y Leonel Guevara están aprovechando las oportunidades porque hay competencia sana. ¿Por qué no alineó a Hermes Martínez? Llegó un día antes del primer partido (viernes 8 de enero) y físicamente no vino acorde al trabajo que se hizo en la reducida pretemporada. En la semana pasada, trabajó bien y es muy probable que juegue el sábado contra Metapán. Ha sido responsable en esperar su turno.
Los goles de su equipo no han sido de los delanteros, ¿lamenta no contar con Addlery? Lo solicité a la directiva, pero el jugador decidió irse a México. Esperaríamos a que Nicolás Muñoz o Arturo Albarrán se nacionalicen para buscar un delantero fuerte y veloz, que tenga las mismas características de Addlery. Mientras eso sucede, espero que Muñoz, Nelson Reyes, Corrales, Álvarez o Darwin demuestren que quieren ser titulares. Dos refuerzos que se frustraron en el camino son Carlos Carrillo (Limeño) y Josué "el Chino" Flores. ¿Qué pasó en cada caso? Carrillo cometió el error de irse de Limeño, cuando ya estaba inscrito en la nómina. Nunca le hablé para que viniera a Águila, pero si pidió la oportunidad de trabajar conmigo porque coincidimos en Nejapa. Estaba atado y no pudo arreglar con nosotros. El domingo lo vi en la cancha, pero no hubo oportunidad para saludarnos... lo del "Chino" fue distinto. No llegó por el tema económico. Me interesaba por que trabajamos en FAS, pero se decidió por Metapán. Espero que este sábado no le vaya bien contra Águila. Después, que rinda con su equipo y con la Selección porque lo ha llamado Rugamas. ¿Cómo va la relación técnico-dirigente con Wil Salgado? ¿Ha tenido algún roce en el camino? Ninguno. Con Wil es diferente al caso que vivió Eraldo Correia. Nunca me ofrecí, ni pedí estar en el banquillo de Águila, aunque dije en otra oportunidad que sí estaba en mi mente dirigir al equipo porque era la quinta vez que preguntaban por mí. Cuando ocurre esto, te dan la confianza y no hay roces. El vínculo técnico-dirigente lo estamos manejando bien. Tenemos un acuerdo de no opinar nada en contra del otro para no afectar al camerino. Antes era expulsado con frecuencia, como le ocurre a sus colegas Edwin Portillo y "Toto" Gamarra... Entendí que los árbitros me expulsaban por tonteras. Desde el año pasado, cuando tenía al Nejapa, vengo cambiando. ¿Qué piensa de la sanción impuesta al "Bochinche", por cuatro juegos? Cuatro juegos es una dura sanción. Le faltó ser más vivo y averiguar por su propia cuenta en la Primera si tenía sanción. Siempre hago eso cuando sé que reclamé al final de un partido o algún jugador tiene tarjeta. Por ejemplo, confirmé con la Fesfut que "el Pichuta" Cabrera tenía un juego de castigo, no dos por la roja que vio en la final. Cada quien sabe qué hace. Si hay un reclamo airado, los árbitros no te perdonan